Magistrados, jueces junto con la base trabajadora se unió al paro laboral por tiempo indefinido que se lleva a cabo a nivel nacional, exigen su autonomía y rechazaron la reforma propuesta por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
De manera simbólica cerraron la puerta del edificio principal, pues se informó que la suspensión de labores se realizará de manera parcial, ya que estarán atendiendo los casos considerados de emergencia relacionados con el acceso a la libertad de las personas, la salud, violencia familia, educación, justicia y vivienda, entre otras situaciones.
El magistrado Armando Díaz López, coordinador de Magistrados del Estado de Guanajuato mencionó que se trata de un momento crucial para el futuro del país, se está defendiendo la independencia judicial y los derechos humanos de los trabajadores del Poder Judicial Federal.
Consideró que la reforma amenaza con violentar los pilares y mecanismos del estado de derecho, además se trata de una afrenta directa del gobierno federal para los trabajadores del Poder Judicial y sus familias.
En su turno, Saúl Briones, trabador del Poder Judicial Federal mencionó que en el paro de labores participan personas juzgadoras y trabajadoras que compartes causas comunes.
Dijo que los manifestantes participan en la causa bajo su decisión, en libertad y rechazó que sea por presión o conveniencia, pues expuso que algunos representantes del poder legislativo han declarado a nivel nacional que se trata nada más del 60 por ciento de trabajadores que tienen una relación directa familiar, situación que no es verdadera.
Por último, se infirmó en la sede del Poder Judicial Federal en Guanajuato capital trabajan 800 personas, todas participan en el paro de labores hasta nuevo aviso, de los cuales el diez por ciento de los empleados estarán en guardia para atender los casos urgentes.
